ADRIANA ELIZABETH RUOCCO
+4
Clásico bodegón de pastas, para ir con familia , amigos y pasarla.simpre bien , sus platos no defraudan , servicio rápido . Los precios son buenos . Dentro de todo es accesible .
Platos de pastas alrededor de 3000 y botella de vino bodega López 3300 .
Los mozos con mucho conocimiento de la carta y de lo que hay disponible a lo largo de la noche
La entrada fue muy bien organizada y optimizada, se nota que tienen experiencia en administrar los ingresos y están habituados a tener cola.
La comida llegó enseguida, las pastas estaban en su punto ideal y son súper suaves. Las salsas y el estofado se llevan el premio grande. Para mi gusto la carne estaba un poco salada por demás y las pastas poco saladas. Porción abundante de queso rallado. Una mayonesa con verdeo y pancitos en la entrada gustaron mucho.
El pan amerita un punto extra.
Los platos podrían haber llegado más calientes.
Por el contrario al flan le faltaba frío.
Los precios nos resultaron accesibles, aunque cobran servicio de mesa, al ser las porciones abundantes generan un buen balance.
Los baños de lugares de este estilo generalmente son el rincón olvidado y esta no es la excepción.
La atención fue óptima.
El salón es muy ruidoso, acelera el querer terminar de comer. El ambiente es súper amigable y familiar.
La carta es amplia en variedades populares.
Las mejores pastas de restaurante que comí hasta ahora, encima los precios son muy buenos, muy recomendable ir si te gustan los fideos, y los postres (fotos) son bien caseros. Comida, bebida y postres para 3 nos salio mucho mss barato que en otros lugares.
Estacionamiento hay en frente pero no le pertenece al local, es aparte.
jose francisco victorino
+5
Si quieren pastas caseras, porciones abundantes y atención cordial, Pippo es el clásico de Buenos Aires que desde el año 1936 ofrece lo dicho y mucho más a los miles de comesales que lo eligen desde siempre, un punto a tener en cuenta y que reza el refrán:QUIEN SABE COMER,SABE ESPERAR!!! Y no es para menos, hágase la idea de que en los horarios de mayor concurrencia, hay que esperar por una mesa, no se preocupe porque la espera bien vale la pena, precios más que acordes a la calidad ofrecida. MUY RECOMENDABLE!!!👏👏👏👏👏
Por los precios que maneja, la relación con calidad y cantidad, es excelente. Los platos re abundantes y ricos. Solo probé la pasta y la verdad nada que envidiarle a otros lugares. Éramos dos personas, pedimos dos vermichellis, uno con bolognesa (lleva carne y jamón) y el otro, para mi el mejor, con pesto y tuco (lleva carne picada); dos gaseosas y gastamos menos de $7mil, total (servicio de mesa incluido). Ah! Y te dan panera con algo para untar. Volvería sin dudarlo.
Sebastian Arze (Palito)
+5
Una de las mejores pastas que probé en mi vida. Restaurante 10 de 10 en todo. Precios accesibles, menú al estilo 100% italiano, la comida buenísima y la atención en el instante. La recomendación, no importa la pasta que pidas, incluyas el mix de salsas (pesto y boloñesa) y no tengas miedo al queso que nunca se acab
Recomendado ir no más de 45 minutos de su horario de apertura ya que luego tienes una cola terrible para entrar.
Muy rica la comida plato de spaguetti 2mil agregado bolognesa mil $, agua saborizada 800$ budiflan con dulce de leche 1400$ flan con crema 1400$. Hay que esperar un rato afuera hasta que se van desocupando las mesas
Excelente experiencia. Almuerzo de mediodía. Pedimos los vermichelis con pesto y tuco (viene con carne) especialidad de la casa. Una bomba de rico. Todo regado con tinto de la casa muy óptimo. Muy buena, rápida y atenta atención. El resto de platos se ven potentes/abundantes. Desde ya volvería y lo recomiendo a todos mis huéspedes de Airbnb. Brutal todo (jaja me pegó un toque el red wine)
Nos encantó el lugar, fácil de llegar.. la comida de verdad exquisita!!!!! Nada que cuestionar.. quisimos dejar propina al mozo, pero no nos aceptó el monto que quisimos darle.
Deberían aceptar lo que les dan!! Propina, es propina. (En el ticket incluía servicios)
Pippo es una cantina porteña que supo y sabe apuntar a un público que nos gustan las pastas. Hace años que voy y nunca jamás defraudó. Un lugar con mozos amigables y una atención impecable. Ni que hablar las pastas como spaguettis con tuco y pesto o tallarines con estofado. Venir y a Pippo es comer como los dioses y a un precio más que razonable. Su fuerte son las pastas aunque se puede pedir minutas y algo a la parrilla, pero insisto, las pasas son un manjar. No dejen de ir.
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